Última actualización: 16 de Febrero de 2021
Compatible
Las recomendaciones de e-lactancia las realiza el equipo de profesionales de la salud de APILAM y están basadas en publicaciones científicas recientes. Estas recomendaciones no pretenden reemplazar la relación con su médico, sino complementarla. La industria farmacéutica contraindica la lactancia, de forma equivocada y sin razones científicas, en la mayor parte de prospectos y fichas de medicamentos.
Tu aportación es fundamental para que este servicio siga existiendo. Necesitamos la generosidad de personas como tú que creen en las bondades de la lactancia materna.
Gracias por ayudar a seguir salvando lactancias.
Immunoglobulin G1 (human-mouse monoclonal rhuMAb-VEGF γ-chain anti-human vascular endothelial growth factor), disulfide with human-mouse monoclonal rhuMAb-VEGF light chain, dimer es Bevacizumab (intravítreo) en Chemical name.
Así se escribe en otros idiomas:Immunoglobulin G1 (human-mouse monoclonal rhuMAb-VEGF γ-chain anti-human vascular endothelial growth factor), disulfide with human-mouse monoclonal rhuMAb-VEGF light chain, dimer pertenece a las siguientes familias o grupos:
Variable | Valor | Unidad |
---|---|---|
Biodisp. oral | 0 | % |
Peso Molecular | 149.000 | daltons |
Tmax | 480 | horas |
Escríbenos a elactancia.org@gmail.com
e-lactancia es un recurso recomendado por Academy of Breastfeeding Medicine - 2021 de Estados Unidos
¿Quieres recomendar el uso de e-lactancia? Escríbenos al correo corporativo de APILAM
Anticuerpo monoclonal humanizado (inmunoglobulina IgG1) producido por tecnología del ADN recombinante.
Actúa bloqueando el factor de crecimiento del endotelio vascular.
La administración intra vítrea se utiliza en la degeneración macular por neovascularización coroidal.
Se excreta en leche materna en cantidad clínicamente no significativa, con valores indetectables (McFarland 2015, Ehlken 2012) y no se han observado problemas en lactantes a cuyas madres se les había administrado (Mc Farland 2015, Tarantola 2010).
Administración intra-vitrea: la pequeña dosis y el ínfimo paso a sangre desde el humor vítreo y el no haber detectado niveles en leche materna ni efectos secundarios en lactantes hacen este tipo de administración seguro durante la lactancia.
En un estudio se ha observado una disminución del 35% de la concentración del factor de crecimiento del endotelio vascular (VEGF) en la leche materna, sin especificar problemas en el lactante, por esta razón algunos autores recomiendan el uso de Ranibizumab el cual parece que no disminuye la concentración de VEGF (Ehlken 2012).
Se ha comprobado el paso nulo o ínfimo a leche materna de otros anticuerpos monoclonales similares, como adalimumab, belimumab, certolizumab, golimumab, infliximab, ipilimumab, natalizumab, rituximab, tocilizumab y ustekinumab (Bar-Gil 2021, LaHue 2020, Saito 2020, 2019 y 2018, Krysko 2019, Whittam 2019, Klenske 2019, Matro 2018, Anderson 2018, Bragnes 2017, Witzel 2014, Ross 2014, Fritzsche 2012).
Por su naturaleza proteica es inactivado en el tracto gastrointestinal, no absorbiéndose, (biodisponibilidad oral prácticamente nula), lo que dificulta o impide el paso a plasma del lactante a partir de la leche materna ingerida (Lactmed, Rademaker 2018, Bragnes 2017, Götestam 2016, Witzel 2014, Butler 2014, Mervic 2014) salvo en prematuros y periodo neonatal inmediato, en los que puede haber mayor permeabilidad intestinal (Sammaritano 2020).
No se han detectado problemas en lactantes a cuyas madres se les administraban otros anticuerpos monoclonales similares, como belimumab, bevacizumab, infliximab, rituximab, tocilizumab o ustekinumab (Bar-Gil 2021, LaHue 2020, Saito 2020, 2019 y 2018, Klenske 2019, Mugheddu 2019, Krysko 2019, Matro 2018, Bragnes 2017, Hyrich 2014, Danve 2014).
Autores expertos consideran seguro o muy probablemente seguro el uso de anticuerpos monoclonales durante la lactancia (Whittam 2019, Matro 2018, Anderson 2018 y 2016, Witzel 2014, Pistilli 2013).
Dada la fuerte evidencia que existen sobre los beneficios de la lactancia materna para el desarrollo de los bebés y la salud de las madres, conviene evaluar el riesgo-beneficio de cualquier tratamiento materno, incluida la quimioterapia, asesorando individualmente a cada madre que desee seguir con la lactancia (Koren 2013).
Puede consultar abajo la información de este producto relacionado: