Cardo Mariano

Se emplean los frutos de esta hierba. Contiene flavolignanos, en especial silimarina y sus isómeros silibinina, silicristina y silidianina, flavonoides, esteroides y compuestos similares a los estrógenos. Propiedades atribuidas: Protector hepático ^{(Fitoterapia.net, WHO 2002)}. Indicaciones de la Comisión E del Ministerio de Salud alemán: colelitiasis, hepatopatías. ^{(Blumenthal 1989)}

Sus componentes se excretan en leche materna en escasa o nula cantidad. ^{(Peila 2015, Di Pierro 2008)}

Su biodisponibilidad es muy baja, con muy escasa absorción oral. ^{(Javed 2011)}

No se han observado problemas en lactantes cuyas madres tomaban cardo mariano o alguno de sus componentes, como la silimarina. ^{(Zecca 2016, Peila 2015)}

Planta ampliamente utilizada en medicina tradicional como protector hepatico. Recientemente se comercializa como galactogogo durante la lactancia ^{(Amer 2015, Sim 2013, Zapantis 2012, CLM 2012, Di Pierro 2008)}. No hay pruebas de su eficacia como galactogogo ^{(McBride 2021, Bazzano 2017, Peila 2015, Mortel 2013, Forinash 2012, Zapantis 2012, CLM 2012, Amir 2011, Jackson 2010, Zuppa 2010)}. Los trabajos realizados que le atribuiyen efecto galactogogo son de metodología defectuosa. ^{(Karapati 2021, Serrao 2018, Zecca 2016, Castoldi 2014, Zuppa 2010, Di Pierro 2008, Vojtísek 1991)}

El mejor galactogogo es una lactancia a demanda frecuente y con técnica correcta en una madre que conserve su autoconfianza. ^{(ABM 2018 y 2011, Mannion 2012, Forinash 2012)}

Dada su falta de toxicidad a dosis habituales, el consumo moderado durante la lactancia tendría escaso o nulo riesgo.

Precauciones al tomar preparados de plantas ^{(Anderson 2017, Powers 2015, Posadzki 2013, Efferth 2011, Kopec 1999, Hsu 1995)}:

• Asegurarse que son de fuente fiable. Han ocurrido intoxicaciones por confusión de una planta con otra con propiedades tóxicas ^{(Hsu 1995)}, envenenamientos por contener metales pesados que extraen del suelo y toxiinfecciones alimentarias por contaminación con bacterias u hongos. ^{(Anderson 2017)}
• No tomar en exceso. Seguir recomendaciones de profesionales expertos en fitoterapia. Los productos “naturales” no son buenos en cualquier cantidad: las plantas contienen sustancias activas de las que se ha obtenido gran parte de nuestra farmacopea tradicional y pueden provocar intoxicaciones o actuar como disruptores endocrinos si se consumen en cantidad o tiempo exagerados, ya que contienen fitoestrógenos. ^{(Powers 2015, Zava 1998)}